1.
Hoy es un día normal en casa de tus padres, dónde estás escuchando a tu padre y madre en la comida hablando apasionadamente de un tema tan común como los derechos de la mujer y los homosexuales, todo muy liberal y democrático. Tienes que hacer ver que sigues siendo la hija predilecta de la familia, ellos no saben que eres una mujer liberada y que tu compañera de piso y tú hicisteis petting en la Joy Eslava el sábado.
2.
Cuando estás eufórica porque tu grupo favorito ha anunciado gira mundial después de 13 años sin sacar disco, y sacan una lista enorme de conciertos en ciudades de todo el mundo. La lees cuatro veces intentando buscar dónde está ese concierto en España. No lo encuentras. Te rindes y miras Portugal: Tampoco. Andorra: Tampoco. Francia: está muy lejos. Acabas mirando billetes para París y te gastas cientos de euros en ir. Te enteras de que tocan en el Resurrection de Galicia a un precio más bajo cuando ya estás aterrizando en el Charles De-Gaulle.
3.
Un día más en los infalibles trenes de Cercanías de tu ciudad. Puntualidad Suiza, no hay ni un segundo de retraso. Hay asientos libres y te toca ventanilla, por supuesto. No hay bebés chillando, ni vendedores de mecheros con un smartphone más grande que el tuyo, ni poligoneros haciendo dominadas en la barra. Te imaginas toda esa utopía mientras el tren lleva parado 10 minutos entre estación y estación en mitad de un túnel.
4.
Estás paseando por el centro de la ciudad y ves desde lejos a una amiga de la infancia que pasea por la acera contraria. La saludas y intentas llamar su atención como si fueras un mono de feria. Te mira pero no reacciona ni parece querer verte. Tu corazón se rompe un poco y sigues caminando.
Una semana más tarde te da un like en Instagram a una foto tuya en la playa. Qué coño pasa.
5. Empiezas a abrir un poco los ojos y los rayos de sol te abrasan el alma. Bienvenida al mundo, son las 13.30 y tienes una resaca del copón. Buscas frenéticamente tu móvil, tu cartera, tus llaves, tus bragas, todo en orden, ayer no hiciste ninguna locura. O sí, pero tú tranquila, ya descubrirás luego que uno de tus ex viene desde Murcia tras recibir anoche un enigmático Whatsapp pasteloso con numerosas faltas de ortografía.
6.
Te acaba de llegar por correo el vestidito cool vintage que pediste en Aliexpress el mes pasado. De repente, con sólo ponértelo engordas 7 kilos, te aparecen michelines, el culo se te hace enorme y uno de los botones sale disparado rompiendo el plasma SmartTV. Te acuerdas de repente de la diferencia de tallas entre China y todo lo que no es China. Lamentas la pérdida de esos 12 euros como si no hubiera un mañana.
7.
Llevas una semana infernal en el curro. Has tragado con todo lo inaguantable, pero eso termina esta noche. Te pones el conjunto éste para el que palmaste medio sueldo en el H&M, te guardas una petaca con alcohol en el bolso, y dejas que todo fluya para que esta noche tu ciudad arda y se reduzca a cenizas bajo tu espíritu indomable y el de tus amiguis. Estás saliendo triunfal de casa cuando de repente… Ha llegado el invitado SORPRESA de la noche, por favor, un aplauso para tu regla.
8.
Qué asco, lunes otra vez. Menos mal que hoy tengo extra de energías y motivación para superar todo lo que se me ponga delante. Un paleta de la obra de enfrente te silba y te dice que si te hacía un traje de saliva. Tu supervisor que si menuda falda llevas. El compañero de curro que te mira de vez en cuando al escote cuando le preguntas si te ha enviado por correo los archivos. Mañana empezarás a llevar tacones para cumplir tu fantasía de pisarle el cuello a gente.
9.
Estás hablando con esa persona especial, tu amor platónico, tu musa, tu femme fatale, ésa mujer a la que le preguntas qué hace el sábado por la noche, te deja en visto y te tiene unos minutos en vilo. Última conexión hace 14 minutos, En línea, Última conexión hace 37 minutos, En línea. Te vas a tomar un calmante y al volver escuchas con alegría el sonidito del chat. Vuelves con mucha ansia para verlo pero es tu madre, que te ha enviado una imagen en baja resolución que dice “Dios te bendiga hoy y siempre, te quiero mucho”, con un perrito de fondo.
10.
Tu Spotify te ha vuelto a traicionar y ha publicado en Facebook que estás escuchando Maluma, Marc Anthony y Sergio Dalma. Lo borras antes de que sea tarde pero ya tiene cuatro likes; tu compañera de piso, tu madre, tu ex de Murcia y la amiga de la infancia que suda de tu cara.
