10 consejos para entrenar que solo podría darte el hombre más fuerte de España

Carlos Demattey a.k.a strongman tarrako, el hombre más fuerte de España, te da 10 consejos que podrías aplicar en tu vida para lograr tus objetivos.

Echar una ojeada al canal de Youtube de Carlos Demattey, a.k.a Carlos Demattey, es darte cuenta de que, por mucho que vayas al gimnasio, eres un mierdecilla. Esta bestia parda de la naturaleza de 36 años es capaz de volcar coches, arrastrar un avión de pasajeros o levantar 228 kilos de press banca como el que se toma un Cola-Cao con galletas para desayunar aunque él prefiere una tortilla de seis huevos y cuatro claras. Con 125 kilitos de peso, una barba vikingesca que ya quisiera Ragnar Lodbrok y 1,78 de altura, este prodigio de la naturaleza venció hace unos meses el Campeonato de Europa de Powerlifting en Polonia. Un título que suma a sus 14 Campeonatos de España de Powerlifting, sus dos Arnold Classic en la misma categoría y la primera posición en la Liga Nacional de Fuerza de 2010, el equivalente nacional al Strongman.

Carlos nos ha atendido por teléfono desde su guarida en un polígono industrial de Tarragona, donde se rodeó de los 100 elegidos que tienen la suerte de entrenar con él tuvo que poner un límite a las miles de solicitudes que va recibiendo y hemos sacado algunas conclusiones bastante chulas. Toma nota porque la versión ibérica de la Montaña de Juego de Tronos tiene unas cuantas cosas que enseñarte.

1. Las cosas llegan cuando no las buscas

No busqué ser un youtuber o tener influencia, en absoluto. Tenía un muy buen trabajo en el Patronato Municipal de Deportes de Tarragona y necesitaba un lugar para entrenar para el Strongman. Junto a un par de chavales a los que también les gustaba, cogimos una parcela, luego ya éramos 10 y buscamos un local de 100 metros, ahora tenemos una nave industrial de 1.000 metros y limitamos el aforo. De hecho, la iniciativa del canal surgió porque me pidieron que lo abriese y así poder divulgar mi filosofía de entrenamiento al resto”, dice Carlos recordándonos que cuando se tiene pasión por lo que se hace no hace falta forzar para que los demás se contagien de tu entusiasmo.

2. Nunca jamás hay que venderse

“He rechazado grandes cantidades de dinero por poner logos y marcas de suplementos en mi canal lo que me ha permitido mantenerme siempre independiente. Puedo permitirme el lujo de opinar lo que quiero y cuando quiero porque no rindo cuentas a nadie. En un mundo en el que lamentablemente todo está orientado a ganar dinero pisoteando todo y a todos y, muchas veces, jugando con las ilusiones de la gente, me parece imperdonable decirle a un chaval que se va a poner como Ronnie Coleman con un bote de proteínas cuando sabes que eso está al alcance de unos pocos. Creo que mi discurso ha calado por predicar con el ejemplo y ser fiel a mis ideas”.

3. La envidia no debe afectarte sino motivarte

“Cuando consigues algo que a los demás les parece imposible lo fácil es echarle la culpa al doping. Lo que mucha gente no ve son las tres comidas que ya llevo en el estómago, los domingos que me he dejado las manos en carne viva entrenando porque no me salía un levantamiento, los años que no he salido de fiesta, las veces que me he ido a dormir a las diez de la noche. Como ellos no han tenido el coraje de hacerlo en seguida te dicen ‘será porque te dopas’. A mí no me afecta la envidia sino que me motiva para entrenar cada día con más fuerza. Cada vez que levanto una barra para hacer un récord pienso en las personas que no quieren que triunfe”.

4. Si quieres ser un campeón, descansa como un campeón

“Si tú lo que quieres es hacer marcas que no hace nadie, tienes que comer y descansar como no hace nadie. El problema es que la gente pretende hacer el entrenamiento de una bestia y luego irse al cine con unos colegas a comerse unas palomitas. Luego vienen los comentarios tipo ‘ufff, este entrenamiento me ha sobreentrenado’. El entrenamiento es vital, pero luego está la alimentación y el descanso que son igualmente importantes. Si no estás dispuesto a llevar todo a rajatabla porque estás currando o de exámenes no pidas milagros. Está muy de moda pretender resultados sin poner esfuerzo o sin descansar, el ‘sobreentreno’ es más bien subdescanso”.

5. En la vida todo es una progresión

“Pasar de levantar tu primera barra de press banca en un gimnasio a arrastrar un Boeing es un proceso de años y años. Cuando llegas a un punto que eres capaz de hacer 300 kilos en sentadilla en tu gimnasio puedes ponerte un arnés y arrastrar un camión. Aunque el gimnasio te da la base, el Strongman son palabras mayores y no todos pueden llegar a ese nivel. Levantar piedras y neumáticos te revienta las articulaciones y hasta los callos de las manos. Mover un camión es una experiencia religiosa y cada paso es un infierno. El arnés te oprime el pecho, te arde y no tienes aire. La preparación mental para estos deportes lo es todo y debe crecer más rápido que tus músculos o no servirá de nada”.

6. Sé un romántico, que quedan pocos

“Soy un tío que llevo mi gimnasio como un romántico. Al que quiera ganar pasta no le interesa tener gente entrenando que mueva todo el gimnasio para entrenar seis días por semana cuatro horas al día. No quieren ese tipo de clientes y por eso prohíben el peso muerto, sentadillas, el magnesio, gritar. Quieren un tío/tía que venga que venga a la elíptica a hablar con el personal y hacerse un par de maquinas pensando que ha hecho la hostia. Hoy día los gimnasios comerciales tienen una función social y lo mejor es que molestes poco y pagues tu cuota. Eres un número, no te conoce nadie. Nosotros nos rebelamos románticamente contra eso, aquí todos los socios tienen nombre y somos una familia”.

7. Los atajos no existen en el camino al éxito

“Yo aquí he llegado picando piedra, no hay otra manera. Es picar, picar y picar. Cuando la gente me dice que el peso muerto es su punto débil yo le respondo que pase de hacer dos a seis veces por semana, hasta que lo borde o reviente. Y si tira la toalla a lo mejor es que no vale para esto. No se puede ser un strongman o powerlifter de éxito si te estás quejando de que te duele la espalda. ¿Cómo no te va a doler si te metes sentadillas con 300 y pico kilos? Tengo una máxima que me encanta repetir: si me levanto cada mañana y me duele algo significa que estoy vivo".

8. No compliques lo que debería ser fácil

“He visto vídeos en Youtube sobre la técnica de press banca y al acabar me he preguntado: ¡¿de qué cojones están hablando?! No se trata de poner un cohete en órbita y si no lo entiendo yo, que algo debo de saber después de 14 campeonatos, imagínate alguien que no tiene ni puta idea o el chaval novato que está comenzando. Parece que hay una moda en la que cuanto más complicado explicas algo, mejor eres. Yo busco lo contrario en mi canal, que mis respuestas las puedan entender desde el primero hasta el último de mis 155.000 seguidores. Que la gente use unos minutos y salga con una idea clara en su cabeza: te va a costar constancia, sudor y lágrimas”.

9. La teoría es importante, la experiencia más

“Me llegan al canal muchos chavales diciendo que no pueden aplicar mis métodos porque son ectomorfos, de metabolismo rápido o lo que sea. En el entrenamiento no se puede tomar todo como un dogma sino como algo orientativo. Parece que ahora hay que ponerle electrodos y telemetría a todo para entrenar al más alto nivel. Es rizar demasiado el rizo y buscar ser más potentes mediáticamente, sin embargo, si esto no se acompaña con la experiencia no sirve para nada. Yo le pregunté a un amigo boxeador: ¿tú entrenarías con un tío que nunca ha pisado un ring? Pues esto es lo que ocurre con muchos gurú de Youtube o instructores de gimnasios comerciales”.

10. Las personas no somos máquinas

“He estudiado 1.000 teorías sobre entrenamientos que después mis alumnos me las han tirado por el suelo. Cuando me hablan de un estudio de la Universidad de Massachussets o algo así yo les recuerdo que jamás pasará de ser una referencia. Cada persona es un mundo y entrenos que a mí me han servido para ganar campeonatos de Europa a otro no le han servido para nada. Hay que probar con rutinas, dietas e ir sintiendo lo que funciona. A lo mejor el día de una competición has discutido con tu novia y no estás centrado. Son miles de factores los que influyen y los que determinan tu éxito. Cada ser humano es único y así lo deberá ser su forma de entrenar y el camino a seguir en la vida”.