Una oenegé desafía a George Clooney para que recicle las cápsulas de Nespresso

Las cápsulas de café están fabricadas con materiales tóxicos como el aluminio o el plástico

Sus anuncios son muy elegantes, pero las famosas cápsulas de Nespresso esconden un triste secreto: no pueden reciclarse por los métodos habituales y muchas acaban infestando parajes naturales. Las playas de la isla de Formentera son testigos, por lo que la oenegé canaria Clean Ocean Project ha decidido presentar una petición al Parlamento Europeo con el objetivo de que se introduzca una ley de sistema de depósito obligatorio para las cápsulas de café, además de comenzar una campaña internacional de concienciación, Clean Ocean Project.

Una campaña que tiene a George Clooney como gancho mediático. El fundador de Clean Ocean Project, Wil Geirnaert, ha emitido una carta al actor estadounidense para que responda a las acusaciones de contaminación ambiental que pesan sobra las cápculas de Nespresso. No ha respondido, pero sí lo ha hecho Katherine Graham, gerente de comunicaciones corporativas de la compañía, que ha explicado a la oenegé que el aluminio de las cápsulas se extrae de forma sostenible y que "han invertido millones en la creación de un esquema de reciclaje global".

La oenegé, sin embargo, discrepa: "Han dado explicaciones relatando las supuestas estrategias de sostenibilidad, pero no dejan de evidenciar que se trata de un producto que prácticamente no se recicla en los países mediterráneos. Nespresso hace creer a sus clientes de todos los países que es una empresa sostenible y respetuosa con el medio ambiente, pero nosotros lo llamanos publicidad engañosa. La huella ecológica es completamente negativa", sostiene Geirnaert en eldiario.es. La batalla contra las cápsulas de café ha comenzado.