Gerber, la famosa empresa estadounidense de alimentos infantiles, lleva desde el año 2010 organizando un singular concurso de bebés para encontrar al “bebé Gerber” del año entre las miles de fotos que envían padres orgullosos de todo el país. La edición de este año ha sido muy especial al dejarnos una noticia muy esperanzadora, especialmente importante para todo el colectivo: Lucas Warren, un bebé nacido en Georgia hace 18 meses, se ha convertido en el primer ganador con alimentos de la historia del concurso. A partir de ahora, su imagen será utilizada para comercializar y representar la marca en las redes sociales.
La fotografía de Warren ha sido elegida entre más de 140.000 fotografías de bebés. Bill Partyka, director de Gerber, ha defendido la decisión de su compañía alegando que “la sonrisa entrañable de Lucas y su expresión alegre se ganaron nuestros corazones este año”. Además, desde la popular compañía alimentaria aseguran que la selección de un bebé con síndrome de Down podría ayudar a aumentar la aceptación social de las personas con discapacidades. Y así lo piensa buena parte de las redes sociales, que han celebrado la decisión del jurado de Gerber con entusiasmo.
La familia Warren, por su parte, ha deseado públicamente que esa sonrisa que ha cautivado al jurado llegue a todo el mundo. "Esperamos que esto impacte a todos, que arroje un poco de luz sobre la comunidad de necesidades especiales y ayude a más personas con necesidades especiales a ser aceptadas y no limitadas. Tienen el potencial de cambiar el mundo, como todos los demás", ha declarado Jason Warren, el padre del bebé, a la revista Today. Además, la familia del pequeño recibirá 50.000 dólares como retribución. Un detalle importante que, sin embargo, queda en segundo plano frente a la importancia social de este pequeña pero necesaria victoria.