Ya sea en Instagram, Twitter o TikTok. Entras unos minutitos para ver qué hay nuevo y, de repente, te das cuenta de que ya llevas casi una hora haciendo scrolling en la pantalla, viendo la vida de los demás. Lo peor es que tampoco estabas mirando “nada” sino que tenías la mente totalmente en blanco. Esto es lo que se conoce como doomcrolling, y más allá de robarte horas de vida, tiene efectos en tu cerebro.
Si últimamente has notado que los días se hacen más cortos y que te falta tiempo, más allá de estar haciéndote mayor y verte sobrepasadx por todas las gestiones de la vida adulta, puede que el doomscrolling sea culpable de ello. Si sumas todas la horas al día que te pasas pegadx a la pantalla sccrolleando te das cuenta de que podrías dedicarlas a cosas para las que nunca tienes tiempo, como leer, ir al gimnasio o aprender un idioma.
Cómo afecta a nuestro cerebro
Además el doomscrolling también afecta a la capacidad de concentración. ¿Cuál fue la última vez que pudiste ver una peli del tirón sin antes mirar un rato el móvil durante el transcurso de esta? Lo cierto es que la posibilidad de encontrar algo que nos guste aun más y el FOMO alimentan esa necesidad de continuar con el scroll. Que la acción pueda ser infinita y que la aplicación siempre te devuelva contenido nuevo, también es un problema. Ahora bien, ¿cómo se puede combatir?
La clave para hacerlo es ser consciente realmente de lo que implica el doomscrolling y saber ver cuando nos quedamos “atrapados” en el scroll infinito. Ser capaz de ver eso, darnos cuenta de cómo interrumpe nuestras vidas es importantísimo. Y decimos interrumpir y no interferir porque al final lo que hace es que dejes de hacer o pospongas la actividad que querías o estabas haciendo.
Algunos móviles como los iPhone incorporan la posibilidad de poner un límite temporal a las apps, aunque al final dependerá de tu voluntad hacerle caso al aviso. Por lo que el truco más efectivo de todos es dejar el móvil en un cajón cuando llegas a casa. Si eres de lxs que no se puede permitir desconectar durante la tarde, al menos hazlo unas horas antes de ir a dormir. Si lo haces, no solo recuperarás tiempo para otras actividades, sino que además conciliaras mejor el sueño y evitaras quedarte hasta tarde haciendo doomscrolling.