Soledad. Últimamente has sentido mucha soledad en tu día a día. Quizás porque has cambiado de ciudad y aún no has tejido una red de gente con la que quedar. Quizás porque tus colegas están a otra y no tienen tiempo para planes sociales. O quizás simplemente porque has ido poco a poco perdiendo personas a tu alrededor por circunstancias de la vida. En cualquier caso, duele. Duele de una manera muy particular. Al fin y al cabo, y como sapiens que eres, no estás diseñadx para vivir en ese aislamiento permanente. De ahí que quiera hacerte una pregunta muy importante: ¿estarías dispuestx a pagar para comer con personas desconocidas de vez en cuando?
Porque es posible. Plataformas como la brasileña Confra o la portuguesa TimeLeft comenzaron a ofrecer este servicio en sus países de origen hace no mucho tiempo y la tendencia se ha extendido ya por todo el mundo. Participa en una cena con seis desconocidos o, mejor aún, con seis amigos que aún no conoces. Es uno de los reclamos de una de estas empresas. Y está funcionando. Por si te lo estás preguntando, sí, algunas de ellas ya han llegado a España y organizan cenas entre desconocidxs en las grandes ciudades del país como Barcelona o Madrid. Como una cita Tinder pero con una intención menos específica y guiada por un impulso muy humano.
¿Cómo funcionan exactamente?
Según cuentan desde la BBC, medio que se hace eco del fenómeno, “los grupos de desconocidos se definen en función de sus afinidades, plasmadas en las respuestas que dan los usuarios de las plataformas al llenar un cuestionario sobre sus intereses”. El trabajo de selección lo hace un algoritmo que cuenta con la info de los cientos o miles de usuarios de la plataforma. No es un match o unmatch entre vosotrxs. Es una máquina la que decide qué juntes deberían funcionar y cuáles no. Ah, y el lugar de encuentro no te lo dicen hasta el mismo día de la experiencia.
Todo está rodeado de misterio. Mente abierta 100%.Y cuidado con los prejuicios. Generalmente, y debido a que son uno de los segmentos poblacionales que más soledad padecen, se suele pensar que estas cosas son cosas de personas de la tercera y de la cuarta edad. Y sí, algunas de ellas también participan, pero la realidad es que, según datos de las propias plataformas dedicadas a esto, “de manera general, la mayoría tienen edades comprendidas entre 25 y 50 años”. Además, y al menos en Confra, “gran parte de su audiencia, del 60% al 65%, es femenina”, aunque en otras apps similares como la de TimeLeft la proporción es equitativa. Y es que la soledad es una pandemia que nos afecta a todxs.