Además de los zares de Rusia, hay otro personaje eslavo que ha pasado a la historia colectiva, especialmente por su leyenda negra. Fue místico y supuestamente amante de la zarina. Grigori Rasputín fue un místico ruso con gran influencia en los últimos días de la Dinastía Romanov, en Rusia, justo antes de la Revolución Rusa. Además de sus habilidades místicas, por las que muchos creyeron que era inmortal, Rasputín destacó como curandero y profeta de la época. Al igual que Nostradamus y el resto de videntes que a lo largo de la historia, Grigori también tuvo visiones aterradoras del futuro. Incluso predijo su propia muerte y la caída de los zares de Rusia y el declive posterior de la Unión Soviética.
La lista de predicciones del favorito de la zarina es larga y aterradoramente certera pese a no haber tenido una educación reglada como tal. Su principal área de formación era la teología. Quienes han estudiado su figura aseguran que la principal fuente de cultura y educación de Grigori fueron la lecturas teológicas del monasterio de Verjoturie, donde pasó parte de su juventud.
Fueron durante estos años cuando Rasputín practicó la introspección y la meditación. Fue entonces cuando el místico comenzó a tener sus primeras visiones y predicciones. Aunque poco conocido por ellas, Rasputín predijo situaciones tan actuales como el cambio climático y las consecuencias que tendría para el mundo la subida de la temperaturas y la polución, como incendios o catástrofes naturales
Las profecías de Rasputín más llamativas
- La Revolución Rusa: Aunque fue uno de los principales asesores de la familia real rusa, Rasputín predijo la muerte de los zares y la revolución. El 7 de noviembre de 1917 se produjo la caída del régimen zarista, dando inicio a una nueva era en Rusia. “No tendrán paz los vivos y no tendrán paz tampoco los muertos. Tres lunas después de mi muerte, veré de nuevo la luz, y la luz se convertirá en fuego”, anticipó. “Será entonces cuando la muerte volará libremente en el cielo y se posará también sobre la familia imperial. Pasarán veinticinco años y la muerte volverá de nuevo a volar... Pasarán más años y la muerte, de nuevo, volará”, enfatizó.
- La corrupción del comunismo y la era posterior a la caída de la URSS: Tras el fin del zarismo en Rusia, el profeta aseguró que “toda revolución pretende romper las cadenas de la esclavitud, pero una vez rotas, ya están preparadas otras cadenas”.
- Clonación o embarazos subrogados: ”El útero de la mujer será como la tierra de los ríos; estériles serán ambos. Y ello será incluso una gracia, porque el útero no estéril y la tierra no estéril parirán monstruos”, vaticinó. “En este tiempo, el hombre, criatura de dios, se convertirá en criatura de la ciencia. El útero materno será comercializado, como se comercializa la carne de los bovinos”, sentenció.
- Su propia muerte: Rasputín vio con claridad que su vida sería breve y predijo que moriría a manos de comunes asesinos y aldeanos por el odio que se granjeó entre la población por su relación con los zares. “Siento que debo morir antes del año. Quiero hacer presente, no obstante, al pueblo ruso, al padre, a la madre de Rusia y a los muchachos, que, si yo soy asesinado por comunes asesinos, y especialmente por mis hermanos aldeanos rusos, tú, zar de Rusia, no tengas miedo, permanece en tu trono, gobierna y no temas por tus hijos, porque reinarán por otros cien o más años”. Rasputín fue asesinado el 29 de diciembre de 1916, un año antes del inicio de la Revolución en Rusia. “¡Rogar, rogar, sed fuertes, pensad en vuestra bendita familia”.