A todxs nos han hecho ghosting alguna vez, aunque cueste creerlo. Ya sea que no te han contestado a un Mail en el trabajo o que iban a contar contigo en un plan y de repente no, el ghosting no solo se vincula a lo amoroso y sentimental, hay de mil tipos. Lo primero que hay que hacer es identificar la situación y saber si estamos en este caso, una vez tengamos el sí es hora de cerrar la relación y marchar hacia delante. Con esta breve guía te mostramos cómo salir del paso lo más tranquilamente posible, y quedarte tranquilx después de una situación que puede resultar muy desagradable.
¿Cómo se si me han hecho ghosting?
El primer paso es identificar si esa persona te ha hecho ghosting o no. Si os habéis visto en persona y luego os habéis dado los contactos y no ha seguido la conversación... Puede ser un caso de “despiste” o de ghosting leve. En este caso (según tu grado de implicación con esta persona) te recomendamos que insistas un poco. Puede pasarte con amigos, rollos y hasta en situaciones laborales. Si en cualquiera de estos tres casos estabais hablando por redes y de repente no te ha vuelto a contestar... tememos decirte que sí se trata de un ghosting, una desaparición de la nada muy desagradable.
Analiza la magnitud del asunto
Muchas veces las personas que hacen ghosting no le dan importancia al asunto, y en según qué casos tú tampoco deberías. Ten en cuenta qué grado de implicación tenías con esta persona, y si no es para tanto seguramente te haya hecho un favor. Valora que nos cruzamos con cientos de personas en nuestra vida y que con algunas no encajamos y en realidad es por nuestro bien.
Elimina los estímulos
Sea cual sea el grado de implicación con esta persona puede dolerte exactamente igual. Lo que te recomendamos es que le silencies en redes sociales y que le borres de todas las plataformas en las que le puedas tener. Ver un BeReal suyo con cualquier persona puede hacerte un daño increíble que solo hará que retrocedas y te plantees por qué estás en esta situación, cuando realmente no tienes nada de culpa.
¿Por qué a mí?
A pesar de eliminar los estímulos y valorar que la importancia de la relación (tal vez) no fuera para tanto el dolor y el miedo se queda ahí. Hay una mosca en la cabeza que te hará que te preguntes si ha sido tu culpa, pero a esa nunca hay que escucharla. El ghosting puede tener mil motivos, pero seguramente tenga mucho más que ver con la persona que lo haga que con quien lo recibe. No asumas una culpa que no va contigo.