Por qué escribir a mano sigue siendo tan importante

Aunque los móviles hayan desterrado el bolígrafo y el papel, escribir a mano nos ayuda a retener mejor la información

Seguramente la última vez que escribiste a mano fue en el instituto o en cole. En la universidad muchos ya tomaban apuntes con el ordenador. De hecho, las pocas veces que has vuelto a hacerlo seguramente a los dos minutos ya te dolía la mano. Pero lo cierto es que escribir manualmente, ya sea para tomar apuntes o para cualquier otra actividad, es más beneficioso de lo que parece.

Hace un par de años que la tendencia del journaling está triunfando en TikTok. Miles de personas comparten sus rutinas que incluyen el hecho de sentarse durante un rato, a escribir cómo les ha ido el día o a proyectar (“manifestar”) lo que quieren que les pase. Lo cierto es que escribir a mano tiene muchos beneficios a nivel de salud mental, ya que nos permite encontrar la manera de poner nombres a nuestros sentimientos y nos obliga a analizar que nos está pasando. Además, también nos permite ordenar nuestros pensamientos y visualizar de manera más clara que está pasando o qué queremos hacer.

El estudio que lo demuestra las diferencias

Pero no solo eso. Escribir a mano puede ayudarte a recordar mejor las cosas, y ya no hablamos de estudiar. El lingüista José Antonio Millán defiende en El País el vínculo de la escritura a mano con el cerebro y la capacidad de memorizar. En un experimento publicado en Human Movement Science en 2006, un grupo de personas adultas trataron de aprender una lengua asiática. A pesar de que, al principio, las diferencias entre los que habían aprendido el idioma escribiendo a mano y otros mecanografiando no se notaban, pasados los meses se descubrió que los participantes que habían aprendido el idioma escribiendo a mano lo recordaban mejor que los que mecanografiaban.

En este estudio se mostró cómo el proceso que hace el cerebro a la hora de retener y filtrar la información es diferente cuando se escribe manualmente que cuando se teclea. Así pues, Karin James, profesora de Ciencias de la Psicología y del Cerebro de la Universidad de Indiana, apunta en El País que la escritura a mano es una gran aliada a la hora de aprender letras, así como desarrollar una mejor redacción. Además, subraya su influencia en el sistema psicomotor y en la capacidad de esquematizar contenidos. Un buen ejemplo de esto último es cuando decides hacer una lista en un bloc de notas para ordenar tus pensamientos u organizar tu día.

Es por eso que, a pesar de que estemos todo el día con el móvil y el ordenador, encontrar un momento para poder escribir a mano siempre nos beneficiará. Además de que a la hora de estudiar puede que sea buena idea volver a los míticos esquemas hechos a mano con boli y subrayador.