Cada unx de nosotrxs tenemos géneros cinematográficos favoritos. Para algunxs es la comedia, mientras que otrxs no soportan ver películas de terror porque después no pueden dormir y tienen pesadillas. En general, las personas somos bastante eclécticas y nos suele gustar un poco de todo. Entre las opciones, hay esas películas lacrimógenas que nos desatan el llanto, esas que nos hacen llorar como descosidos. Ya sea porque es una historia que nos despierta la empatía, o porque su belleza nos deja sin palabras. Hasta ahora, pensábamos que llorar viendo una peli era una señal de debilidad, de persona sensiblona y demasiado emocional. Pero un estudio nos dice que incluso llorar mirando una peli puede tener beneficios para nuestro estado de ánimo.
Llorar es una respuesta emocional que está vinculada con la liberación de oxitocina, la hormona del amor, de la calma y del contacto. Esta se desencadena por las conexiones emocionales que se forman a través de las experiencias sociales retratadas en una película. Un estudio de la Universidad de Tilburg investigó qué le pasaba a nuestro cerebro cuando veíamos una película dramática. Los psicólogos se dieron cuenta de que las películas más tristes podían mejorar el estado de ánimo de quienes las veían.
No tener miedo a mostrarse vulnerable
Para que el lloro tenga este efecto calmante, tienes que dejarlo fluir sin ataduras, sin reprimirlo. Las personas emocionalmente fuertes no reprimen el llanto, porque no tienen vergüenza o la necesidad de no incomodar a la otra persona que las acompaña. En realidad, cuando liberamos el llanto durante una película, significa que tu atención está profundamente comprometida y que el argumento ha conseguido generarte emociones fuertes.
Llorar es una señal de que sabemos empatizar con los personajes implicados en la narración. De esta forma, eres más capaz de saber qué es lo que está pasando en el guion, y tienes más inteligencia para entender por qué los personajes actúan de cierta forma. Cuanto mayor sea la carga emocional de la película, nuestro cerebro liberará más oxitocina, como nos explican en La Mente es Maravillosa. Y más allá de la película, esta capacidad de empatía en la vida real significa que puedes sentir en la piel las emociones de los demás, que tienes herramientas para leer las situaciones y aplicar tu inteligencia emocional.
Como nos explican también en La Mente es Maravillosa, la empatía “se encuentra vinculada con las neuronas espejo”. ¿De qué se encargan? Pues hacen lo posible para que nos pongamos en la piel de los demás. Y a pesar de que algunos dirán que tener empatía es algo perjudicial, las personas que carecen de ella no saben conectar con los demás, y enfrentan muchas dificultades en sus relaciones personales.
Las personas emocionalmente fuertes saben que llorar no es malo y que incluso tiene beneficios deseados. Con el llanto pueden sentir ese sentimiento de desahogo necesario, empatizar con el resto de personas y conectar con los demás.