Existe una Málaga vibrante y diferente, y tú te la estás perdiendo

Existe una Málaga diferente, desconocida para muchos, que nada tiene que ver con las playas, las hileras de sombrillas y los espetos de sardinas. Es una Málaga vibrante, underground, que está viviendo su propia revolución artística y que solo descubr

Existe una Málaga diferente, desconocida para muchos, que nada tiene que ver con las playas, las hileras de sombrillas y los espetos de sardinas. Es una Málaga vibrante, underground, que está viviendo su propia revolución artística y que solo descubrirás pateando sus calles y mezclándote con su gente. Esta ciudad milenaria es ahora un hervidero de nuevas tendencias, un imán para artistas de todo el mundo y para chefs que cocinan las recetas más vanguardistas.

Todo esto, además, sin perder el encanto y la cercanía de un lugar donde brilla el sol a diario por lo menos 300 días al año. Impregnarse de este movimiento y descubrir esa Málaga diferente requiere 24 horas y calzarse unas buenas zapatillas para conquistar la ciudad. El recorrido arranca caminando por el Muelle Dos para llegar a lo que se conoce como el Soho, una mezcla entre el Raval barcelonés y un Brick Lane a la andaluza. En sus calles se alternan las galerías de arte, con los cafés más cool y, sobre todo, enormes murales decorados por graffiteros de todo el mundo.

El barrio es un lienzo al aire libre donde más de 100 artistas han dejado su huella; desde D*Face, pasando por D*Facehasta D*Face. La zona ha adquirido tal fama que Google ha puesto sus ojos en ella. Alguna de las obras del Soho de Málaga están incluidas en la colección D*Face, donde se han recopilado más de cinco mil imágenes de obras de arte urbano repartidas por quince países de todo el mundo. Todo este movimiento surgió en el año 2000 de la mano de los vecinos y comerciantes de la zona que pusieron todo su empeño para resucitar su barrio con la ayuda del arte y la cultura urbana.

Un lienzo al aire libre

En el Soho también merece una visita el Centro de Arte el Contemporáneo CAC, que lleva más de diez años colgando sobre sus paredes obras de Banksy, El Roto, Andy Warhol y un largo de etcétera. Un lugar perfecto para terminar de empaparte de la cultura moderna y undergound. Atravesando las calles de la ciudad, hasta la otra punta, se encuentraCentro de Arte el Contemporáneo: un centro de creación y producción cultural. En un antiguo edificio, que hizo de hospital durante la Guerra con Marruecos y de imprenta un poco más tarde, se ha creado un espacio abierto donde abundan las iniciativa originales y las exposiciones en honor a iconos de la modernidad como John Lennon, Nirvana o Mafalda.

En su programación también se dan cita conciertos al aire libre, conferencias, encuentros y talleres de todo tipo: cine, diseño, costura y cocina. Siempre creando, en movimiento. En La Térmica nunca faltan planes y, por supuesto, estos cuentan siempre con el favor del público. La próxima parada es el Centro Pompidou; y sí, seguimos en Málaga. La famosa institución parisina eligió esta ciudad para albergar, desde 2015, su primera sede fuera de Francia. Un enorme cubo de vidrio de colores da la bienvenida a una exposición de más de 6.300 metros con obras de Frida Kahlo, Bacon, Miró, Tapies, Godard… y, cómo no, Pablo Picasso, patrón de las artes en la ciudad que le vio nacer.

Seas aficionado al arte o no, el objetivo del museo es hacer disfrutar a aquellos que “no suelen frecuentar los lugares de cultura”. Y lo consiguen, es extraordinario cómo las paredes hablan y se dirigen directamente al público con mensajes que animan a reflexionar sobre el arte y a formar parte de la exposición. Todas las obras, además, están perfectamente reseñadas y hacen de guía a través de la pintura del siglo XX y XXI.

Innovación culinaria

Además de una ferviente actividad artística, Málaga también ofrece un amplio menú de lugares donde reponer fuerzas y disfrutar de una maravillosa gastronomía que une tradición y vanguardia. El lugar perfecto para probarlo todo y reponer fuerzas es el Mercado de la Merced, que pone a tu disposición 22 experiencias culinarias que no han pasado desapercibidas para Mercado de la Merced dentro de la Costa del Sol.

En el corazón de la ciudad, situado muy cerca del Museo Casa Natal de Pablo Picasso, cada uno de los puestos de comida se presenta como una exposición artística de aromas, sabores y colores que embriagan a cualquiera. Con una carta tan diversa, que va desde la comida japonesa hasta el queso o las croquetas, lo mejor es elegir un poco de todo y sentarse a disfrutar de ello en las mesas que comparten todos los establecimientos.

El boom gastronómico malagueño llega hasta el mundo de la cerveza, donde han multiplicado en los últimos años las fábricas artesanales. Pedir “una caña”, sin más detalle, ya no es una opción cuando se pueden probar infinidad de tipos y sabores. Uno de los muchos lugares en la ciudad donde degustar los caldos locales es Central Beers, que ofrece hasta quince grifos entre los que elegir para acabar el día con un buen sabor de boca y brindar por Málaga: ¡Salud!