Cómo puede la Inteligencia Artificial ser importante para mejorar la salud mental

La gran cantidad de datos que procesa y la capacidad de aprendizaje pueden hacer de la IA una gran herramienta para terapeutas y personas con problemas de salud mental

De entre los trabajos que parecen estar amenazados por la Inteligencia Artificial, seguramente uno de los que menos peligren sea el de psicólogx. Pero no porque la Inteligencia Artificial no tenga mucho que aportar a la psicología y al cuidado y prevención de la salud mental, sino porque el componente humano es, o al menos parece, imprescindible.

Según ha publicado recientemente el digital La Mente es Maravillosa, la IA se centrará sobre todo en mejorar las tareas de diagnóstico y prevención de enfermedades mentales. Como sucede con la medicina en general, la capacidad de procesar tal cantidad de datos y de ir aprendiendo de los patrones que va absorbiendo hacen que la Inteligencia Artificial sea capaz de identificar con éxito, a partir de los datos previamente analizados, cuando podemos estar ante un trastorno de ansiedad, una depresión y otros trastornos.

Ya existen, de hecho bots conversacionales con el objetivo de estudiar y evitar la depresión. Y se crean otros para prevenir la soledad de adultos mayores. Tal cantidad de datos permite incluso saber qué terapias y tratamientos son más eficaces para cada pacientes y los chats conversacionales pueden servir para detectar pensamientos suicidas.

Si tienes un bot con el que hablas sobre tu estado de ánimo, puede aprender a identificar las situaciones más de riesgo con casos anteriores y avisar al entorno o al profesional pertinente si detecta una situación extrema. Variables sociales, hábitos de vida, condiciones médicas, genéticas y neurológicas podrán ser tenidas en cuenta a la hora de analizar problemas mentales.

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Un estudio de la revista Pervasive and Mobile Computing detectó que la IA detecta síntomas de ansiedad con más del 92% de precisión. Esta puede aumentar a medida que aprenda de sus errores.

Todo eso, además, servirá para ofrecer guías y consejos a psicólogxs basados en todos los datos y casos procesados.

Entre las aplicaciones que ya existen, destaca Reach Vet, basado en la Inteligencia Artificial, que sirve para prevenir el suicidio entre veteranos de guerra. O The Crisis Contact Simulator, que simula conversaciones que sirven de asistente para profesionales.

Existen también apps como Wysa que ayudan a manejar los síntomas de ansiedad y depresión. E incluso chatbots que dan mensajes de apoyo y soporte emocional, especialmente a jóvenes.

Qué terapia es más beneficiosa, diagnósticos afinados, seguimiento de pacientes, guías para profesionales e incluso mejor distribución de fármacos (limitándolos cuando no sea necesario en función a casos de éxitos previos), apoyo conversacional gratis a toda la población y mecanismos de control del suicidio conforman una larga lista de herramientas que la Inteligencia Artificial puede proporcionar a la lucha de la sociedad por una mejor salud mental.