Tres películas sobre inteligencia artificial que te darán mucho mal rollo

¿Estamos preparados para convivir con una inteligencia superior?

Durante varias décadas la inteligencia artificial fue tan solo una promesa. Una que muchas personas esperaban con ilusión por su aparente potencial para liberar a la humanidad del trabajo. Para llevarnos al siguiente nivel como civilización. Para hacernos la vida más feliz. También una que muchas otras personas temían por ser territorio desconocido. Por la supuesta amenaza de que esa misma inteligencia artificial fuera capaz de funcionar al margen de los dictados humanos y apoderarse del mundo. Aún no hemos llegado a ninguno de esos dos supuestos tan extremos, pero sí hemos presenciado el nacimiento de las IAs. Celebrémoslo con unas cuantas películas que dan bastante mal rollo.

Her, 2013

Cuarta y última película dirigida por el cineasta neoyorquino Spike Jonze. Aquí las inteligencias artificiales no han tomado forma corpórea en plan Yo, robot, sino que continúan restringidas al ámbito de lo digital. Pero eso no lo hace menos perturbador: el protagonista se enamora de una IA que actúa rollo Alexa ultra avanzada desde el sistema operativo de sus dispositivos electrónicos. Lo hace porque se siente solo, pero también porque esta IA es tan inteligente que puede expresar emociones, articular intenciones y tomar decisiones para llenar ese hueco humano. Y al final del relato termina sufriendo de lo lindo. Una advertencia de cómo una inteligencia tan superior podría manipularnos.

Ex Machina, 2014

Ex Machina salió a la luz tan solo un año después de la mano de Alex Garland, autor de películas como Aniquilación y de series como Devs. Hay algo en ella que la convierte en algo más que una peli sobre inteligencias artificiales: su tensión, su pulso, su misterio, hacen de ella un pedazo de thriller con todas las letras. Merece la pena verla solo por eso. Pero es que además ahonda nuevamente desde otra perspectiva en la misma pregunta fundamental: ¿debemos dar vida a inteligencias artificiales que podrían sobrepasar vastamente nuestras capacidades? Esta vez no vamos a decirte mucho más porque es una cinta que debe verse lo más virgen posible. Pero el mal rollo está mega asegurado.

Blade Runner, 1982

Es la película entre las películas de ciencia ficción sobre inteligencias artificiales. De eso no hay duda. Basada muy libremente en la novela de Philip K. Dick ¿Sueñas los androides con ovejas eléctricas?, Blade Runner, de Ridley Scott, dibuja un mundo en el que la humanidad ha cortado las alas a las mismas inteligencias artificiales a las que un día dio vida. Y el motivo es muy sencillo: miedo. Porque en todas estas películas se llega una y otra vez al mismo lugar. A ese punto en el que, por primera vez en nuestra historia como especie, nos topamos con algo que puede pensar más eficazmente que nosotros. Y tememos que lo utilice en nuestra contra. Tiene 41 años pero se deja ver de maravilla.