Tres películas de terror de los 70 que marcaron toda una época

¿Cansadx de las nuevas fórmulas de demonios y posesiones? Vuelve a los orígenes. Aquí nació todo

Que hayas clicado en este artículo tiene una muy probable explicación: eres unx entusiasta de las películas de terror. Las ves todas. Cada una de las que aparece en la cartelera del cine la devoras. Y muy a menudo te llevas un chasco porque giran en torno a los mismos temas, emplean los mismos recursos y dejan ver los hilos de una fórmula mil veces repetidas. Sin embargo, esa fórmula no siempre estuvo ahí, esos recursos no siempre se usaron y esos temas no siempre se trataron en la gran pantalla. Por el contrario, fueron una serie de películas valientes y de la mayor belleza artística las que los llevaron a lo más alto. Obras que comenzaron a brotar alrededor de los años 70.

La semilla del diablo, Roman Polanski, 1968

A Roman Polanski se le pueden reprochar muchas cosas, pero que no haga películas deliciosas no es una de ellas. Y La semilla del diablo es un indicio incontestable. Como decíamos antes, hoy las películas de posesiones y brujerías están más que trilladas y explotadas, pero entonces, en 1968, en absoluto. La cinta narra la historia de Rosemary, una mujer que queda embarazada de un bebé que, ella siente, no será normal, en parte porque recuerda haber hecho el amor con una extraña criatura que le ha dejado el cuerpo lleno de marcas. La fotografía es sublime. Las actuaciones dignas del Óscar y el Globo de Oro. No es extraño que sea una de las más valoradas de la historia del terror.

El exorcista, William Friedkin, 1973

Tampoco es extraño que El Exorcista siga siendo, más de medio siglo después, uno de los elementos más reconocidos de la cultura pop del terror en el mundo entero. Porque fue toda una revolución: el terror tan perturbador, las escenas tan brutales y directas, los efectos especiales y el propio relato asaltan tus sentidos por completo. Sí, es una película de posesiones, de demonios, de inocencia transformada en pura maldad, como has visto ya setecientas veces en una sala de cine, pero esta fue la primera que lo hizo con tal capacidad de impacto. Incluso hoy, con tanta cosa vista, con tanto meme alrededor, El exorcista sigue siendo una experiencia perturbadora si te metes de verdad en ella.

La profecía, Richard Donner, 1976

Esta puede que te suena también por la secuela que han sacado este 2024: La primera profecía, una excelente película de terror de las serias, de las que no viven del jumpscare sino de la reconstrucción de una pesadilla a través de los planos meticulosamente elegidos, la fotografía y la inolvidable actuación de Nell Tiger Free. Pero la primera es la primera. En ella, una mujer da a luz a un bebé muerto y su esposo lo cambia por otro vivo gracias a su situación de poder para no hundir a su esposa. Más tarde, cuando comienzan a pasar cosas muy inquietantes, acaba por descubrir que adoptó al mismísimo Anticristo. Quizás sea demasiado tarde. Quizás no. Ya lo descubrirás cuando la veas.