Boxeo: por qué deberías darle una oportunidad

Los deportes de contacto tienen muchos detractores debido a la violencia consentida que presentan. A algunas personas simplemente les parece muy primitivo eso de pegarse ostias. O incluso peligroso. Y el boxeo entra dentro de esta categoría. Es más, se trata de uno de los más populares del mundo. No obstante, el nivel de agresividad y daño en el boxeo no viene estipulado en ninguna parte: no tienes por qué boxear duramente. De hecho, puedes practicarlo tú solitx con un saco. Aunque no es lo mismo, te seguirás nutriendo de los increíbles beneficios que, según señalan desde Vitónica, tiene esta práctica deportiva para tu salud física y mental, pero sin tensiones ni riesgos de lesiones.

En primer lugar, tienes el aumento de tu resistencia aeróbica, pues “el boxeo es una actividad que combina movimiento con fuerza explosiva para cada uno de los golpes que vamos a llevar a cabo”. Este esfuerzo cardiorespiratorio, que mantiene tus pulsaciones elevadas, tiene otra consecuencia: la aceleración de tu metabolismo, lo que incrementa la quema de calorías y te ayuda a mantenerte en un peso saludable. Además, debes tener en cuenta que el trabajo muscular que implica el boxeo y sus entrenamientos específicos también aumenta el tamaño de tus fibras musculares, lo que supondrá tanto una mejora estética como un incremento del consumo calórico en reposo. Incluso tumbadx quemarás más.

En segundo lugar tienes la potenciación de la concentración. Los deportes en general requieren de este ingrediente, pero, tal como recuerdan desde el mencionado medio, “el boxeo es una actividad que requiere mucha coordinación y mucha conciencia de lo que se está haciendo”, lo que va provocando una mejora inconsciente de tu capacidad para prestar atención a lo que debes prestar atención. Y de esa mejora surge el tercer gran beneficio del boxeo: funcionar como una válvula de escape para el estrés acumulado a lo largo de tus días y de tus semanas. Y “no solo por la concentración que requiere, sino también por la energía que eliminaremos con cada golpe”. Renaces tras cada sesión.

Pero eso no es todo. Además, la práctica continuada del boxeo te proporcionará un fortalecimiento del core, una mejora de las posturas que se traduce en un menor riesgo de molestias y lesiones, una mayor consciencia de tu propio cuerpo, una mayor agilidad y una mayor fuerza. Y todo eso se ve reforzado por los entrenamientos del boxeo complementarios al propio boxeo en sí. A fin de cuentas, “las clases de boxeo no se centran en dar puñetazos a diestro y siniestro”, sino en “ejercicios y rutinas de acondicionamiento físico completo que nos pondrán a tono y mejorarán el estado general del cuerpo”. Quizá no sea para ti. Quizá acabe no encajándote. Pero conociendo sus beneficios, ¿por qué no probarlo?