Cómo seguir marcando tendencia comprando menos ropa

Época de rebajas. Llevas más de dos meses de compras y más compras: Navidad, los Reyes Magos y hasta, seguramente, algún que otro cumpleaños. No puedes regalarle algo a alguien y dejar sin presente a otra persona de la familia, así que detalle tras detalle no solo ha volado el dinero sino que el planeta ha muerto un poco más. No lo has visto morir pero todos los desastres que ahora mismo destrozan los rincones naturales de nuestro mundo también son resultado de la falta de consciencia sostenible que existe en nuestro día a día. Parece que vestir a la moda no es compatible con lo eco,  pero con ciertas pautas es posible estar dentro de las tendencias y, además, comprando mucho menos.

Parece un tópico pero es realmente importante diferenciar las necesidades de los caprichos. Para eso debes analizar un poco tu armario y detectar dónde están los nichos. Quizás quieres comprarte algún pantalón más o ampliar tu colección de vestidos pero a lo mejor es hora de renovar la ropa interior y utilizar esas prendas que tienes más abandonadas.

Primero tienes que saber cómo es tu día a día. Por ejemplo, si trabajas en una oficina desde las ocho de la mañana hasta las seis de la tarde y debes ir vestidx más o menos arregladx, de nada te sirve tener 20 pantalones de chándal. Bastará con unos cinco o seis como mucho. Lo mismo sucede con tu eterna promesa de ir al gimnasio: si aún no te has apuntado, deja de comprarte los outfits más deportivos. Espera a necesitarlos de verdad, es decir, apúntate primero y luego utiliza los que ya tienes. No sigas acumulando.

La eterna y pospuesta limpieza de armario. Ese momento en el que tienes que enfrentarte a la ropa que te pillaste hace dos años y que no has usado aún porque 'el momento no ha llegado'. Creemos que ese momento ya no llegará. Eso sucede en ciertas ocasiones muy puntuales con prendas también muy puntuales. Tienes que tener objetivos claros a la hora de limpiar tu armario. Si detectas que hay algo que no te pones y que nunca te has puesto, está claro que tienes que dejarlo marchar. Regálaselo a alguien, haz un mercadillo o busca una alternativa, pero deshazte de esas prendas. Después, detecta los motivos por los que jamás te pusiste esa ropa para no volver a repetir los mismos errores a la hora de comprar.

Las rebajas son el momento más complicado para dejar de lado esos chollos a 1,99€ que parece que te están diciéndote: 'cómprame'. Cuando veas ese tipo de prendas tan sumamente rebajadas debes saber que detrás no solo hay explotación sino la utilización de materiales contaminantes de poquísima calidad. Que te pilles esa prenda no es necesario y, además, estarás matando al planeta porque probablemente te dura poco. Detente un momento antes de comprar y mira la etiqueta. Es posible comprar ropa de tendencia hecha con tejidos naturales como cualquier tipo que esté reciclado, el algodón orgánico, el bambú, el cáñamo o el piñatex. Y si justo vas buscando algo y está súper rebajado, mejor que mejor.

Básicos sí, básicos siempre. Debes construir un fondo de armario con este tipo de prendas y dedicar mucho más tiempo a esa ropa que marca tu estilo o te diferencia. Al final hacemos casi siempre lo opuesto: comprar muchas prendas distintas de colores o estampados variados que no tenemos claro si combinarán con el resto de nuestra ropa. 

Existe una especie de prejuicio eterno con este apartado. No nos cansaremos de decir que la ropa de segunda mano es el futuro. Piensas que lo que ya está usado no tiene valor o está sucio. Hay muchas personas que ya se han apuntado a esta ola no solo porque hay prendas únicas sino porque, además, puedes encontrar ropa de buena calidad. Y lo más importante: estás salvando al planeta a un precio asequible. Con un poco de paciencia, podrías hasta tener la opción de comprarte una pieza de alta costura. Todo son ventajas. Este 2020 es el momento ideal para volverte un poco más sostenible, luego quizás no haya tiempo.