Dimite el ministro francés de Medio Ambiente tras reconocer que no ha podido cambiar nada
“¿Hemos comenzado a reducir el uso de pesticidas? La respuesta es no. ¿Hemos comenzado a controlar la erosión de la biodiversidad? La respuesta es no. ¿Hemos comenzado a ponernos en situación de frenar la artificialización de los suelos? La respuesta es no”. Estas fueron las palabras de Nicolas Hulot, ministro de Transición Ecológica y número tres del gobierno francés, al anunciar su dimisión por sorpresa a través de una radio francesa.
El ecologista se ha mostrado desencantado por la falta de avances, por su propia incapacidad y por una sociedad que no es capaz de cambiar un modelo arraigado y dominante que no hace sino destruir el medio ambiente. Estas decepciones fueron las que lo llevaron a dimitir un hecho que, según explica, no ha sido comunicado de antemano al presidente francés, Emmanuel Macron, ni al primer ministro, Édouard Philippe.
Nicolas Hulot ha expresado que esta decisión ha sido una de las más difíciles de toda su vida y ha asegurado que ha sentido cierta soledad en esta lucha por el medio ambiente dentro del Gobierno: “No quiero seguir mintiéndome. No quiero dar la ilusión de que mi presencia en el Gobierno significa que estamos a la altura de estos problemas y, por tanto, tomo la decisión de abandonar el Gobierno”, ha sentenciado.
Aunque sus palabras parecían tener la intención de mandar un mensaje a quienes están por encima de él, el ecologista ha asegurado sentir admiración por Macron y Philippe y ha querido dejar claro que esta decisión no tiene como objetivo atacar de ninguna manera al Gobierno. Lo que sí busca el ahora exministro es que su salida “provoque una profunda introspección de nuestra sociedad sobre la situación del mundo”. Y, como en todas las problemáticas medioambientales, empecemos a darle forma a un cambio desde nuestro lugar en el mundo: piensa globalmente, actúa localmente.