Listening parties, ¿maravilla o monetización extrema?
La industria de la música camina peligrosamente hacia la elitización. Sí, ahora no tienes que comprarte cada disco que sale para poder escucharlo y con una suscripción en Spotify o en Youtube puedes disfrutarlo sin anuncios. El acceso a la música se democratiza. Pero, por otro lado, fenómenos como el de los precios dinámicos de las entradas para shows y conciertos están haciendo que ver en directo a tu artista favorito sea literalmente imposible. A quienes dominan la industria se les está yendo la olla y están convirtiendo el encuentro entre músicxs y público en una cosa solo disponible para gente con pasta. Y no son solo los conciertos: las listening parties también exprimen tu cuenta bancaria.
¿No sabes lo que son? Muy sencillo: son esos encuentros en los que el artista de turno te deja escuchar el álbum nuevo antes de que salga al mercado. Y lo normal es que la mayoría de gente invitada sean periodistas, críticxs musicales y de vez en cuando algún fan con mucha suerte que entra ahí por sorteo o cosas así. La idea del artista era recibir feedback, explicar algunos puntos de su nueva obra y facilitar el trabajo a la gente de prensa para hablar de ella y promocionarla. Y ya está. Ahora, y como cuenta la periodista Inma Moraleda, este evento íntimo de marketing se está transformando en otra oportunidad más para lxs artistas de exprimir tus ahorros. Las listening parties ya son un negocio más.
Y ejemplos hay muchos. Lo ha hecho Kanye West en los Estados Unidos. Lo han hecho caras conocidas del rap español como Delaossa. Y lo ha hecho Aitana. Y esta última es la que definitivamente las ha puesto en el mapa y ha hecho que se abra este debate alrededor de ellas: cobró 16,50 euros por entrar al Movistar Arena para escuchar su disco antes de que se estrenara. Tú salías de ahí encantadx, diciéndole a todo el mundo lo guay que suena el nuevo álbum y haciéndole un poco la campaña de marketing, y ella ganaba promoción e ingresos. Y, obvio, la experiencia está buena y puedes vivir un momento de comunidad con la artista y con el resto de fans. Eso nadie lo niega.
La cuestión es si como fan te mereces eso. Porque antes, cuando unx seguidorx era invitadx a una listening party, solía ser a modo de recompensa por su fidelidad. Por estar siempre ahí. Por invertir en todo lo que publica su artista fav. Ya eso se va a perder. Ahora también esto pasará a formar parte del dinero que tienes que apartar para ser unx real fan de esx músicx. Y es duro. La vida está muy precaria y muy cara al mismo tiempo y no tienes ingresos suficientes para estar a todo. Y, ya, mucha gente dirá eso de pues no vayas a esto y ya está, pero no es sencillo para quien mantiene un vínculo emocional con una de estas estrellas. ¿Es que ya nadie agradece la lealtad?