Jimmy Kimmel obtiene la nacionalidad italiana en rechazo a Trump
Lo que tienen los matones como Donald Trump es que obligan a la gente a posicionarse muy rápidamente: rollo o estás conmigo o estás contra mí. Y mientras las grandes empresas parecen decididas a plegarse a los intereses y valores del presidente naranja, con ejemplos como Pixar, algunas celebridades le están plantando cara. Es el caso del presentador y comediante estadounidense Jimmy Kimmel, quien ha mostrado su oposición a Trump en infinidad de ocasiones y que, en un último movimiento de protesta, ha decidido obtener la ciudadanía italiana como una manera de rechazar contra la política reaccionaria del mandatario norteamericano.
Obviamente, no se la han dado by the face. Resulta que Kimmel, conductor del programa Jimmy Kimmel Live! de la ABC, nació en el barrio neoyorquino de Brooklyn, pero tiene ascendencia italiana por parte materna. Como él mismo ha dicho en The Sarah Silverman Podcast, “acabo de obtener la ciudadanía gracias a mi querida abuela Edith, cuya familia es originaria de Candida, en la provincia de Avellino”. Un descendiente de inmigrantes más en un país, Estados Unidos, que se construyó precisamente a base de personas llegadas de todo el mundo, por más que las voces ultraderechistas del país se empeñen en rechazarlas ahora con puro odio.
El movimiento de Kimmel tiene algo de autoprotección. Sí, la deriva autoritaria del gobierno de Trump invita a prepararse para lo que pueda venir. En sus propias palabras, “lo que está pasando es tan malo como uno se imaginaba. Es mucho peor, es simplemente increíble. Siento que probablemente sea incluso peor de lo que él hubiera deseado”. Algo, si se le está yendo la mano a Trump con su propio juego o no, que no podemos saber realmente. Lo que está claro es que cada vez más personas están alejándose del país de una manera u otra por miedo a lo que ocurrirá y por rechazo a lo que ya está ocurriendo. Porque Kimmel no está solo para nada.
Como explican en El País, “desde que Trump ganó las elecciones presidenciales, derrotando a la candidata demócrata y ex vicepresidenta Kamala Harris, varios artistas y personalidades de Estados Unidos anunciaron que dejarían el país a modo de protesta”. Como la presentadora Ellen DeGeneres. O como la comediante y actriz Rosie O’Donnel, a quien el presidente amenazó con quitarle la ciudadanía, ante lo que esta no reculó: “¿Quieres revocar mi ciudadanía? Adelante, inténtalo, rey Joffrey con bronceado de spray color mandarina”. Es lo que el mundo necesita ahora de sus estrellas: una defensa activa de los derechos humanos básicos.