Un estudio demuestra que abrazar es la mejor manera de ayudar a alguien que sufre

Los resultados también revelan que los abrazos son tan eficaces para sanar psicológicamente en mujeres como en hombres

Tu compañero de piso acaba de tener una discusión horrible con su pareja y camina por la casa como un zombie apaleado. Tu estrategia, cargada de buenas intenciones, es sentarle en el sofá para hablar sobre lo sucedido. Escucharle y darle algunos consejos. Y esa comunicación verbal está bien, pero probablemente estés obviando la técnica más importante para que las emociones negativas provocadas por el conflicto disminuyan de intensidad: darle un buen abrazo. Así acaba de confirmarlo una investigación llevada a cabo por varios científicos de la universidad estadounidense de Pittsburgh.

Durante dos semanas, los autores del estudio entrevistaron a 218 hombres y 186 mujeres acerca de temas como el estado anímico, posibles conflictos con otras personas o posibles abrazos recibidos cada día. Las conclusiones, publicadas en la revista académica PLOS One, indicaron que las personas que reciben abrazos tras un conflicto personal experimentan un aumento más reducido de los sentimientos negativos y una caída menos intensa de los sentimientos positivos. De hecho, y según los investigadores, los abrazos son más eficaces que las palabras para ayudar a otra persona a superar los efectos de una discusión.

Por otro lado, los resultados del estudio dejan otras dos conclusiones muy valiosas. En primer lugar, las mujeres que participaron reportaron haber recibido abrazos más días que los hombres, probablemente como consecuencia de los prejuicios de género en torno al contacto físico y la ternura. Y en segundo lugar, y aún más importante porque derriba esos mismos prejuicios, que "tanto los hombres como las mujeres pueden beneficiarse igualmente de ser abrazados cuando surge un conflicto", apuntan los autores. Todos somos humanos. Y no importa de donde venga el abrazo: amigos, parejas, familiares...

Conocer la potencia sanatorio de los abrazos es muy importante porque los conflictos interpersonales pueden provocar trastornos psicológicos e incluso físicos de no ser paliados adecuadamente. No obstante, los propios autores reconocen que las causas de esta supremacía del abrazo sobre las palabras como mecanismo de cura ajena continúa siendo un misterio, aunque especulan que la razón podría ser que, mientras ambas técnicas proyectan empatía, las palabras de consuelo podrían expresar de forma implícita que el afectado no sabe lidiar con las emociones negativas. Así que ya sabes: regala abrazos, regala salud.