La hora del terror: el truco para la productividad de moda
Bajo la procrastinación pueden latir muchas emociones diferentes. Una de ellas, de las más habituales, es la pereza. Simplemente no hallas la motivación para ponerte con esa tarea tan aburrida que tienes pendiente. Pero otra es el miedo. No un miedo atroz, no un pavor paralizante al que no puedes hacerle frente, pero sí una ansiedad profunda por el hecho de que la tarea resulta complicada. Prefieres ponerte con cualquier otra cosa antes que sumergirte en algo que no controlas demasiado. Porque casi no sabes ni por dónde empezar. La simple idea de meter mano al asunto te embajona y te impulsa a pillar el móvil para perder tu tiempo en redes. Pero hay solución: la técnica de la hora del terror.
Diseñada por el empresario, científico y conferenciante TED Viputheshwar Sitaraman, la técnica consiste en planificar una hora concreta de tu día para dedicarlo a esa tarea tan desafiante que tanta ansiedad te provoca. Y lo debes hacer el día antes. Lo primero, explican en el medio digital Trendencias, “es que hagas caso a Steve Jobs primero e identifiques cuál es tu franja horaria más productiva”. Ya sabes que hay gente que se siente especialmente enchufada en las primeras horas de la mañana, gente que se siente a tope a mitad de tarde y gente que tiene una energía tremenda durante las noches. Localiza la tuya. Será en esa franja específica donde insertes tu hora del terror.
El día antes, además, también es recomendable acotar muy bien los objetivos que tendrás en dicha hora. Sí, tienes que completar esa tarea, es obvio, pero establece preliminarmente el camino. Con una especie de esquema de actuación te valdrá. No es lo mismo enfrentarse a los monstruos con un plan que improvisando. ¿Lo tienes? Pues ahora descansa bien. Al día siguiente, cuando llegue la hora del terror, entra en el deep work mode: “nada de whatsapp, nada de reuniones, nada de emails, nada de distracciones”. En el terror no hay entretenimiento. No hay un subterfugio. Eres tú contra el mal. Tú contra tus ansiedades. Tú contra la maldita tarea. Debes concentrarte en ella.
Después de todo, aseguran desde el mencionado medio, “cada vez que cambiamos de actividad el cerebro tarda unos minutos en volver a concentrarse” ya que “el cerebro no es multitarea”. ¿Pero y si surge algo verdaderamente importante? En ese caso, dice Sitaraman, solo tienes permitido saltarte la hora del terror una vez. No puedes hacerlo de nuevo al día siguiente. Al fin y al cabo, la idea es que logres crear un hábito que te permita encarar diariamente la tarea más compleja. Necesitas enviarle a tu cerebro el mensaje de que esa hora es sagrada. Será muy beneficioso para tu vida. Como dice este experto, “la tarea más complicada suele ser también la más importante”.