Razones para invertir tu dinero en comprar tiempo
La mecánica del trabajo como concepto está muy clara: inviertes tiempo para conseguir dinero. Un tiempo preciosísimo de vida que no volverá. Un tiempo que podrías estar empleando en actividades que realmente te llenen. Un tiempo de libertad. Así ha sido siempre y nadie lo veía particularmente mal. La vida era trabajar y trabajar. Sin embargo, las cosas han empezado a cambiar. Hoy el tiempo personal se ha revalorizado de una manera brutal. Y tiene sentido: la vida es muy corta en realidad. Por eso cada vez más personas están desandando el camino e invirtiendo dinero en comprar tiempo. Porque es el mejor patrimonio posible.
Una manera de hacerlo consiste en reducir la cantidad de horas dedicadas al trabajo. El camino no es sencillo: pasa por convertirse en un profesional freelance y decidir libremente cuánto tiempo echarle al curro durante tus días. A veces renunciando a un sueldo mayor. A veces renunciando a la estabilidad. Pero con tiempo a tu disposición para aprovechar tu vida. Y no solo tiempo. Como explican desde Xataka, también es muy importante la carga cognitiva, esto es, cuántos recursos mentales dedicas a algo. Y la jornada de cuarenta horas semanales monopoliza demasiado tu espacio cognitivo. Apenas tienes tiempo para pensar en otras vainas.
Deja de priorizar el dinero
Pero el trabajo no es lo único que te roba tiempo y espacio cognitivo. "También este escenario social perverso que en muchos casos se ha construido alrededor de la presencia online". Además de tus ochos horas semanales, tienes que invertir tiempo de ocio en mantener tu Linkedin optimizado para que surjan más oportunidades, subas en la escala socioeconómica y entre más pasta en tu cuenta bancaria. E Instagram. Y TikTok. Y todo lo que te da visibilidad. "En algún momento empezamos a valorar el trabajo como algo instrumental, a mandar a paseo Instagram y a dejar de priorizar la pasta en la carrera profesional".
En cierto modo, es como si pagaras por librarte de ciertas responsabilidades autoimpuestas. Lo mismo pasa con Spotify, Netflix o Steam. Muchas personas dicen que los algoritmos de estas plataformas te dicen que tienes que escuchar, ver o jugar. Y la pregunta es: ¿tan malo es eso? ¿Acaso no merece la pena invertir dinero en una suscripción para no solo tener a disposición ciertos contenidos sino también para no tener que perder a diario tu tiempo en buscar el idóneo? Una pérdida de tiempo que no es preocupante, pero que cuando se va acumulando "deriva en pérdidas de concentración y frustración", dicen desde Xataka.
Más ocio y menos trabajo
En última instancia, se trata de reducir las tareas a tu cargo. "Y así, pasando por servicios que hacen lo que nosotros ya no queremos hacer si podemos librarnos de ello, o pagando ciertos sobreprecios a cambio de no tener que ir buscando chollos, o simplemente renunciando a más dinero a cambio de permitirnos un par de horas de ocio el viernes, vamos cambiando las reglas a medida que pasan los años". No importa el modo concreto en que se desarrolle porque el cambio de tendencia está claro. En el futuro, y cada vez más hoy, un tiempo ocioso más amplio y liberado es más valioso que más dinero. ¿Cómo podría no serlo?