6 consejos científicos para vencer tus problemas a la hora de dormir

Aumenta la creatividad. Mejora el aprendizaje. Adelgaza. Protege nuestro corazón. Alarga la vida. Y nos hace más atractivos. Son algunas de las ventajas que supone dormir entre 6 y 8 horas diarias bien dormidas. Sin embargo, hasta el corazón sufre algún tipo de problema que le impide conciliar el sueño o dormir con calidad. Porque tan malo es corazón como dormir mal. Por eso, hoy te traemos seis consejos científicos de corazón para esos problemillas típicos que te privan del descanso que mereces.

Si tienes problemas para quedarte dormido por las noches, deberías plantearte abandonar el teléfono móvil fuera de la habitación. Te distrae e impide que desconectes como necesitas y, además, su luz azul dificulta que te quedes dormido. También deberías evitar el café o las bebidas energéticas a partir de la tarde y hacer ejercicio diario.

Aunque nos guste estar megacalentitos, nuestros cuerpos deberían estar a 20 o 21 grados cuando descansamos. También es importante no beber mucho líquido horas antes de dormir para evitar despertarnos a orinar y arriesgarnos a nuevos problemas para conciliar el sueño. Ah, y el alcohol cuanto menos mejor, pues reduce la cantidad de tiempo que pasamos en fase REM.

Quedarnos en la cama más tiempo del que debemos o posponer diez minutos y luego otros diez minutos la alarma no ayuda a nuestra calidad de sueño. En lugar del caos mañanero, lo ideal es levantarse siempre a la misma hora para que el cuerpo se acostumbre de forma natural y sea menos doloroso.

Un 24% de los españoles tiene síntomas de acidez gástrica. Es bastante común y muy desagradable, por lo que en ocasiones impide que durmamos como deberíamos. La clave está en encontrar la medicación y dieta adecuada vía profesional médico y, mientras tanto, dormir de costado izquierdo y con una almohada muy alta.

Ocurren cuando los músculos están fatigados, el cuerpo está deshidratado o hay carencia de potasio o magnesio. Y, además de ser tremendamente dolorosos, te estropean el sueño. Así que intenta estirar adecuadamente, masajearlos después de entrenar o de un día duro así como mantenerte bien nutrido e hidratado.

Si sufres dolores de hombro, lo mejor que puedes hacer es dormir boca arriba y abrazando una almohada. Si lo tuyo son los dolores de espalda, evita dormir boca abajo y coloca una almohada entre tus piernas. Y si tus dolores son en el cuello, busca rápidamente una almohada firme y preferiblemente de látex. Ólvidate de esas almohadas que no mantienen la forma.