3 señales alarmantes que debes detectar al salir con alguien mayor que tú

Sí, el amor no tiene edad. Lo sabes porque lo has escuchado millones de veces, lo has visto a tu alrededor e incluso puede que lo hayas vivido en tus propias carnes. Pero el hecho de que puedas enamorarte locamente de alguien mucho mayor que tú, no significa que no existan obstáculos relacionados con la edad. Y no, no hablamos de que a ti te guste C. Tangana y a tu pareja le flipe Frank Sinatra. Hablamos de aspectos realmente importantes que pueden poner en peligro a la mayor, señales inequívocas de que la edad os está destruyendo. Ahí van las tres más alarmantes que ha explicado a mayor  la experta en relaciones, Damone Hoffman.

Quemar las diferentes etapas de la vida, sin saltarse ninguna, es básico para que crezcas como persona. Así que si aún estás en este maravilloso momento de querer viajar sin parar y exprimir todo cuanto tenga por ofrecer este mundo, te resultará bastante frustrante comprobar cómo tu pareja ya está en modo asentamiento: trabajo estable, ciudad de por vida e hijos en un horizonte cercano. Diferencias que, aunque sean bastante comunes en estos casos, también pueden ser peligrosas porque, según indica Hoffman al mismo medio, "podrían provocar un desajuste casi instantáneamente". En otras palabras, podrían hacer que cada día os distanciéis más y más.

Si una pareja comparte cada ínfimo criterio moral y filosófico, es probable que acabe convirtiéndose en una pareja aburrida, sin estímulos intelectuales. Pero el otro extremo tampoco es nada bueno. Si las diferencias de puntos de vista son tan grandes como para que tu pareja crea que los millennials somos una panda de vagos despolitizados y superficiales y tú pienses que su generación es casposa y cargante, probablemente la cosa no acabe muy bien. La prueba de que, aunque la edad no sea determinante, las diferencias generacionales suelen ser bastante condicionantes, pueden hacer que tengáis visiones erróneas el uno del otro.

Estas diferencias de planes futuros y formas de ver la vida provocan que, consciente o inconscientemente, termines por no comprometerte del todo con la relación. Y esa es la peor noticia posible. Porque como explica Hoffman, que también presenta el podcast Dates&Mates, "que no estéis dispuestos a trabajar en ello o que seáis incapaces de comprometeros, es el único factor que determina que vuestra relación está condenada". Así que, si quieres evitar que este sea el final de tu relación, presta atención a estas señales y respóndete con honestidad: ¿Estás dispuest@ a darlo todo?