Cae la venta de patatas fritas: el origen de una crisis que afecta a todo un sector

La caída de vendas de patata fritas en los restaurantes dice mucho de la situación económica que vivimos
¿Crisis de las patatas fritas? Así ha caído su venta y consumo en restaurantes

Del índice del pintalabios al de las patatas fritas. Durante años se ha utilizado el nivel de ventas de pintalabios para medir cómo de cerca está un país de una crisis. A más pintalabios comprados, más crisis. Ahora, pasaría lo mismo con las patatas fritas.

Actualmente, las vendas de las patatas fritas se están convirtiendo en un indicador importante de lo que está ocurriendo en la economía global y cómo están cambiando nuestros hábitos de consumo. Las patatas fritas son el acompañante por excelencia en los restaurantes, ya sean de comida rápida o el bar Manolo de la equina, pues bien, el descenso de la venta de patatas fritas es un indicador de un cambio en los hábitos de consumo de la gente. Concretamente, que salen menos a comer fuera.

Lamb Weston, una de las mayores empresas de patatas fritas congeladas del mundo y proveedor de gigantes como McDonald’s y Yum! Brands (propietaria de KFC, Pizza Hut y Taco Bell), ha publicado unos resultados decepcionantes en sus últimos informes financieros. No están vendiendo tantas patatas fritas como antes, lo que ha comportado una caída dramática en el valor de sus acciones y ha puesto en alerta a todo el sector de la comida.

Tom Werner, el CEO de Lamb Weston, ha señalado que uno de los principales motivos de esta situación es el cambio en los hábitos de consumo debido a la inflación. Con los precios de los menús subiendo (especialmente en los restaurantes de comida rápida), la gente está saliendo menos a comer fuera. Hay personas que puede que prefieran invertir su dinero en otras actividades antes que salir a comer fuera.

Este cambio no es exclusivo de Estados Unidos. En España, por ejemplo, también se ha detectado cómo en el 2023 hubo una disminución en la demanda de bebidas en restaurantes y una reducción en el consumo fuera del hogar. Otro síntoma de cómo las pautas de consumo van cambiando.

La gracia de toda esta historia (y lo que lo convierte en un índice) es el hecho de cómo algo tan simple y humilde como son las patatas fritas congeladas de bolsa han tenido un impacto en el mercado bursátil. Las acciones de grandes cadenas de comida rápida han caído, y los índices que agrupan a estas empresas también han mostrado pérdidas.

Las patatas fritas están sirviendo como medidor para explicar un patrón de la economía global mucho más complejo como es la inflación.

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