Razones por las que te pone la gente evitativa

Puedes salir de esa espiral. Solx o con ayuda de unx profesional de la salud mental
Por qué puede ponerte la gente que te evita aunque sea tóxico

Mira que hay personas en el mundo. Muchas de ellas emocionalmente estables y con las ideas claras. Pero no: tú no sueles fijarte en esa gente sino en quienes parecen tener problemas con el compromiso. Siempre igual. Siempre terminas cayendo en esa dinámica. En enamorarte de alguien con una razón, a veces sólida, a veces ridícula, para no centrarse en la relación que tiene contigo. Y eso es una mierda. Porque sufres y porque mereces mucho más que eso. Pero no crees poder evitarlo: son esas personas las que te entran por los ojos, las que captan tu atención y las que te ponen más cachondx. Y una y otra vez te preguntas mentalmente a qué viene esta obsesión con la gente evitativa.

Y la psicoterapeuta Jennifer Nurick tiene varias hipótesis, la primera de las cuales apunta a la percepción de las relaciones románticas que se construyó durante tu infancia en base a la relación de tus padres. En sus propias palabras, “viste que tenían una dinámica de relación en la que uno era más evasivo y el otro más ansioso, estaban juntos pero emocionalmente desconectados”. Y eso podría haberte marcado. No lo piensas a menudo. No lo tienes demasiado presente. Pero una experiencia así a tan temprana edad moldea mucho tus expectativas y define en cierto sentido quienes te atraen más. Hay algo inconsciente en tu cerebro que anhela replicar la relación que presenció en casa.

Pero también podría ser cosa de tu autoestima. Al fin y al cabo, si no es lo suficientemente sólida es muy posible que sientas que el amor es un bien que debes ganarte. Y bajo esa premisa es muy sencillo terminar permitiendo que te traten mal una y otra vez. Tu pensamiento no es que esa persona sea negligente emocionalmente o incluso cruel, no, es que tú no estás haciendo las cosas bien para obtener su cariño. Una idea loca y kamikaze que debes quitarte de encima cuanto antes. Si ves que te cuesta, que tu autoestima está tan por los suelos que no tienes la capacidad de revertir la situación, no dudes en acudir a terapia. Hay una vida mejor más allá de ese desprecio y descuido.

Además, escribe Nurick, hay otras razones para caer tanto en las redes de la gente evitativa: una herida romántica sin cerrar que hace que te castigues a ti mismx poniendo tu corazón en manos de alguien que no te hace sentir segurx, una personalidad muy orientada hacia el cuidado de lxs demás y con tendencia a adoptar el papel de salvadorx o simplemente una predilección por lo complicado. Por supuesto, tu historial no tiene por qué responder a una sola de estas razones. En realidad lo más probable es que se den simultáneamente varias de ellas. Sea como sea, lo que está claro es que no quieres ni deberías querer seguir así. La programación de tu cerebro puede cambiar.

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