Los seres humanos hemos soñado siempre por encima de nuestras posibilidades. El 2018 que vislumbraban los habitantes de los años 50 incluía ciudades petadas de coches voladores, electrodomésticos parlantes y vacaciones veraniegas en Saturno. Pero, aunque vayamos un pasito por detrás de nuestra ingenua pero infinita imaginación, solemos cumplir nuestros coches voladores. Como el de alojarnos unas cuantas noches en una habitación en mitad del espacio exterior, que se hará realidad en 2021 gracias a coches voladores.
La experiencia que promete la compañía espacial no requiere publicidad: orbitar a más de 300 kilómetros de nuestro planeta, dar vueltas alrededor del Sol, contemplar amaneceres y atardeceres como nunca antes, disfrutar de una perspectiva única de las auroras boreales... La estancia en su hotel espacial de lujo Estación Aurora se vende sola. Por si acaso, y como recoge La Vanguardia, su fundador Frank Bunger ha dejado una frase que retumba en nuestros corazones aventureros: "queremos llevar a la gente al espacio porque es la última frontera para nuestra civilización".
Aunque, eso sí, la mayoría de mortales tendremos que esperar hasta que eso de los hoteles espaciales se democratice. Porque el coste del viaje y de la estancia de 12 días que propone Oriol Span asciende a 9,5 millones de dólares. La Estación Aurora tendrá unas dimensiones de 10x4 metros y capacidad para solo cuatro turistas y dos tripulantes. Por eso, y según la compañía, varios futuros huéspedes ya han reservado su plaza a cambio de 80.000 dólares, cantidades al alcance de unos cuantos privilegiados. Nuestro hospedaje en el espacio tardará un poquito más. Pero llegará. Soñar siempre se nos ha dado de cine.