Partamos de la base de que eres una buena pareja que ama a la otra persona. Y muy importante: lo demuestra en el día a día. Aún así, siempre tienes problemas en tu relación porque tu novix no se siente completamente seguro de tus sentimientos. Duda. Malinterpreta tus acciones. Se monta películas cada por tres en las que estás desenamorándote y pensando en dejarle. Lo pasa mal innecesariamente. ¿Y por qué? Según el psicólogo estadounidense Mark Travers, es bastante probable que tenga un estilo de apego inseguro. No es su culpa. Tampoco la tuya. Pero hay algunas cositas que puedes hacer para construir una relación segura en la que se sienta mucho más protegidx.
Para empezar, escribe el propio Travers, cambia los juicios por compresión. Imagina que tu pareja, debido a su inseguridad crónica, hace de una circunstancia trivial un problema. Se raya. En una situación así sería normal que te frustraras y le criticaras por dejarse llevar por esa gran inseguridad interna. Sin embargo, deberías “reemplazar los comentarios despectivos como ‘deberías haber sabido cómo manejar mejor la situación’ por otros como ‘veo que hiciste todo lo posible’”. De esa manera no reforzarás su inseguridad. Todo lo contrario: tu validación hará que se sienta comprendidx y aceptadx, lo que resulta clave para que vaya ganando confianza. Estáis en el mismo barco.
Recuerda que solo eres su acompañante
Otra estrategia que Travers cree que deberías implementar es la integridad. Es decir, ser comprensivx con la inseguridad de tu pareja, pero no participar de los conflictos que crea dicha inseguridad ni en las fases posteriores de culpa. En sus propias palabras, “si tu pareja tiende a compensar en exceso después de una pelea, por temor a lo que puedas pensar de ella, debes hacerle saber que los desacuerdos están bien y que tenerlos no significa que de repente ya no te guste tu pareja”. Hazle saber que no tiene que compensar ahora dándote mucho más amor de lo normal, sintiendo remordimientos profundos o expresando constantemente lo mal que ha actuado.
Por último, recomienda este especialista, harías bien en fomentar las conversaciones sobre seguridad emocional. En concreto, dice, “usa el tiempo justo después de una pelea para que tu pareja sepa exactamente cómo te hizo sentir y consultar sobre lo que puedes hacer la próxima vez que se sienta ansiosa o triste”. Esa curiosidad y ánimo de equipo os mantendrá a flote y hará que esa inseguridad funciona como motor de crecimiento. No obstante, recuerda que tú papel es el de acompañante, no el de salvadorx. La persona que tiene que trabajar en su apego para transformarlo poco a poco y ser menos conflictivx es él o ella. Tu empatía y paciencia simplemente se lo pondrán más fácil.